Hola a todos!
Soy Angélica de Colombia y amo Corea del Sur. Aunque es algo que ya hace parte del pasado quiero compartirles que como latina, la experiencia de vivir allà me marcó la vida. Estuve por 10 meses trabajando con el gigante Samsung y su parque de atracciones llamado Everland que es como un Disneyland inmenso, y en realidad fue mágico. Pero a parte de amar mi trabajo, era esa organización tan maravillos de todas las cosas la que me cautivó. El trabajo era intenso pero cuando tenÃa dÃas libres y podÃa ir a caminar por las calles de Seúl, me lo disfrutaba al máximo. Hay unas boutiques increÃbles, un comercio muy variado y a precios bajos. Y si querÃa hacer un pausa entraba a uno de esos cafés donde todo era delicioso y podÃa pasar horas ahÃ, incluso en una ocasión tuve que pasar la noche en uno, porque perdà el último que me llevaba a casa y pagar un taxi era bastante y preferà esperar.
Y la rumba latina... ¡La locuraaa! Hay bares y discos geniales... Quién va a creer pero los coreanos bailan mejor que uno. Toman clases y son bien dedicados, lo bueno es que cuando te sacan a bailar son muy respetuosos y no son de los que empiezan a draguear.
La comida fue en principio algo duro para mi, solo escogÃa los sitios que conocÃa, las cadenas mundiales de hamburguesa o sandwich. Pero poco a poco fui descubriendo los sabores tÃpicos coreanos y ya no querÃa volver a Mc Donalds... Eso sà todo picante, pero lo disfruté. Allà se acostumbra a compartir mucho a la hora de la comida y muchos de los platos son para varias personas y todos sirven de un mismo recipiente. También se bebe bastante alcohol todos los dÃas de la semana e incluso para acompañar la cena.
La gente es timida pero tan amable al mismo tiempo, puedes encontrar en la calle una señora que te va tratar como su hijo. Muy educados y respetuosos, amantes de la tecnologÃa, por supuesto, pueden llegar a ser tus amigos increÃbles.
En fin, tengo mil anécdotas y recuerdos fabulosos, volverÃa sin pensarlo dos veces. Ahora me encuentro en Francia y es otra historia. Quisiera volver a vivir ese cuento de hadas. La belleza está en los ojos del que ve, asà que busca siempre la belleza en todo.
Un abrazo, feliz dÃa a todos